En esta semana el Congreso aprobó la Ley de Financiamiento, con la cual el Gobierno nacional busca financiar parte del Presupuesto General de la Nación para el próximo año. Los pensionados deben estar tranquilos porque esta nueva Ley no los tocará.
Debemos resaltar que esta ley no aumentará la base del IVA, mantendrá el actual régimen de IVA aplicable a los contratos de prestación de servicios y no tocará las pensiones de los colombianos. Sin embargo, crea condiciones tributarias para las empresas de economía naranja. Se reduce la tarifa de renta del 33% al 30% de manera gradual en los próximos cuatros años. Permitirá el descuento del IVA de la inversión en bienes de capital a partir del año gravable 2019. Asimismo, las empresas podrán descontar de renta el 50% del Impuesto de Industria y Comercio a partir del año gravable 2019 y en su totalidad en 2022. Se mantiene la deducción del 50% del Gravamen a los Movimientos Financieros.
Se establece la tarifa del impuesto del 1% a los patrimonios de más de $5.000 millones; el impuesto a las ventas de inmuebles de más de $918 millones se reemplaza por un impuesto al consumo de todos los inmuebles que excedan ese valor, excepto los predios rurales destinados a producción agropecuaria; y se incrementa la tarifa del impuesto de renta para las personas con ingresos mensuales promedio mayores a $40 millones. Entre otras medidas.